9 de septiembre de 2010

Ley de Glaciares: del veto al congelamiento

LA PRESIÓN DEL SECTOR MINERO VOLVIÓ A BOICOTEAR LA PROTECCIÓN DE LOS GLACIARES

A pesar de los reclamos de organizaciones sociales de todo el país y de los miles de correos electrónicos y llamadas telefónicas que realizó la ciudadanía, la Comisión de Ambiente del Senado, en una insólita sesión a puertas cerradas, no aprobó el dictamen que habilitaba el inmediato tratamiento del proyecto de Ley de Glaciares aprobado en Diputados y suspendió su debate en el recinto hasta el próximo 30 de septiembre, lo que hace peligrar seriamente el futuro de la norma. Como hace dos años, cuando la presidente vetó la norma, resultó evidente (una vez más) la fuerte presión que está realizando el sector minero para congelar la iniciativa.

Por Hernán L. Giardini

Este atraso en la sanción de la Ley de Glaciares no tiene otra razón que la presión de las provincias mineras sobre los senadores. Claramente, la protección de los glaciares está siendo boicoteada por las empresas y provincias mineras y resulta lamentable que el Senado no haya mostrado ninguna convicción en materia ambiental.

Las miles de llamadas y correos electrónicos que recibieron los senadores durante estos días, demuestran que la Ley de Glaciares es muy importante para los argentinos. Sin embargo los legisladores priorizaron los beneficios de un sector por sobre el bien común, que son los glaciares.

Para entender qué está en juego, vasta con revisar dos casos emblemáticos como son la mina de Veladero y el proyecto minero Pascua-Lama, que lleva adelante la empresa canadiense Barrick Gold en San Juan. Los mismos están ubicados en la cordillera alta y se estima que deberán ser revisados si la Ley de Glaciares se aprueba sin cambios.

La Ley de Glaciares estipula que el Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA) deberá realizar un inventario de los glaciares y el área periglaciar, y establece en su artículo 15 que en caso de verificarse impacto significativo sobre glaciares o ambiente periglaciar (por actividades mineras, petroleras, por ejemplo), se podrá “ordenar el cese o traslado de la actividad y las medidas de protección, limpieza y restauración que correspondan". Además, la norma le pone un freno a los nuevos proyectos hasta que esté terminado dicho inventario.

Es por ello que, si el inventario determina que la mina Veladero, que está en plena producción, está dañando un glaciar o una zona periglaciar deberá parar de hacerlo y resignar una parte de la explotación minera. Lo mismo sucedería con Pascua-Lama, con la diferencia que el proyecto aún está en preparación.

La Comisión Regional de Medio Ambiente de Atacama (Chile) señaló en un informe que “de acuerdo a lo observado en la visita a terreno, efectuada por el comité técnico, con fecha 12 de enero de 2005, es posible señalar que uno de los puntos importantes es que se observó una gran acumulación de material sedimentable en la superficie de los glaciares Toro 1 y Toro 2. Esto se podría atribuir a los trabajos que se han estado realizando durante varios años en la zona en la etapa del anteproyecto, al contrario de lo que se pudo apreciar en el glaciar Estrecho donde su superficie estaba totalmente limpia. (…) Lo anterior explica en gran parte la alta pérdida de masa que se ha presentado en algunos glaciares de la zona”. Y luego advierte que “no es aventurado pronosticar la tendencia a la extinción de los glaciares más expuestos a los trabajos futuros de la Minera”.

Esto demuestra la importancia que tiene esta ley para nuestros glaciares, y que quienes están en contra de la misma, como ya manifestó el gobernador de San Juan, José Luis Gioja, privilegian los intereses de la Barrick Gold por sobre los glaciares.

Mediante una carta dirigida a los senadores nacionales, organizaciones ambientalistas manifestaron su adhesión al proyecto de “Ley de Presupuestos Mínimos para la Preservación de los Glaciares y del Ambiente Periglacial” aprobado hace tres semanas por la Cámara de Diputados y reclamaron su urgente sanción.

La carta, firmada por Amigos de la Tierra Argentina, la Fundación Ambiente y Recursos Naturales, la Fundación Vida Silvestre Argentina, Greenpeace, y el Taller Ecologista, señala que “el texto aprobado contiene todos los elementos necesarios para establecer un régimen eficaz de protección de las áreas glaciares y de un sistema de monitoreo de la evolución y estado de las mismas”.

Las organizaciones ambientalistas afirmaron que existe un consenso generalizado a nivel mundial sobre el valor intrínseco que, tanto los glaciares como el ámbito periglacial, poseen como reservas de agua dulce, así como sobre la imperiosa necesidad que su protección impone frente a actividades con el potencial de producir en ellos daños irreversibles. Además, el calentamiento global amenaza con su desaparición total en pocas décadas si los estados, en particular los más afectados, no asumen su defensa con legislación y medidas coherentes tanto en el ámbito local como internacional.

Frente a esta grave situación, las organizaciones consideran que “las herramientas estratégicas que plantea la ley son imprescindibles para la urgente y adecuada protección de las reservas de agua dulce y los ecosistemas de alta montaña, en los cuales los glaciares son un componente clave. Las regiones en las que se desarrollan actividades de alto impacto, como la minería, deben implementar dichas herramientas y fundamentalmente valorar los servicios ambientales que prestan los ecosistemas contribuyendo a sostener las economías locales”.

En ese sentido, manifestaron que “resulta de vital importancia que el Senado de la Nación apruebe sin demora este proyecto, para otorgar no sólo la protección necesaria para estos recursos vitales, sino también una eficaz planificación estratégica para un área de sensible valor ambiental como lo es la Cordillera de los Andes”.

A pesar de la innegable importancia de la norma, los senadores privilegiaron los intereses de un sector por sobre los del resto de la sociedad y congelaron su tratamiento.

Mientras tanto, los glaciares siguen en peligro.




http://www.contracultural.com.ar/

Para recibir el Boletín Contracultural:
contracultural-subscribe@gruposyahoo.com.ar

No hay comentarios: