12 de abril de 2017

De paros, marchas, violencias, intolerancias, memorias y otras yerbas



ARGENTINA SUMA  VARIOS CONFLICTOS SOCIALES A LA CRISIS ECONÓMICA 

No es solamente la economía. Es también la violencia institucional, la estigmatización de los más pobres, la violencia de género, la no aceptación del distinto, los debates históricos inconclusos. Un conjunto de conflictos que subyace a la problemática más urgente y cotidiana, pero que genera una situación social de creciente tensión e incierto desenlace. 

Por Marcelo R. Pereyra  

Los enemigos 

Los argentinos nunca hemos vivido en un amable y pacífico paraíso. Como todo país en desarrollo y dependiente, la Argentina se ha construido sobre la base de la distribución desigual de la renta y de la violencia estatal necesaria para garantizar la inequidad social y económica. Desde que el país ingresó de pleno al sistema capitalista, hacia fines del siglo XIX, han existido innumerables luchas sindicales y sociales para tratar de obtener un pedazo más grande la torta distributiva. Desde el poder de turno esas luchas siempre fueron reprimidas con mayor o menor dureza gracias a la gentil colaboración de las policías y el ejército. De principios del siglo XX hay dos ejemplos para tener en cuenta: la Semana Trágica y los fusilamientos de los obreros rurales de la Patagonia, ambos acontecimientos ocurridos durante la presidencia de Hipólito Yrigoyen, un político que siempre fue reivindicado como “nacional y popular”.

Las clases burguesas y propietarias también defendieron sus privilegios y sus intereses con leyes represivas, como la de Residencia, de 1906, o los edictos policiales que facultaban a la policía a detener a una persona sin orden judicial. Pero quizás la operación más exitosa de los poderosos para neutralizar a los rebeldes y disconformes ha sido la de crear un aparato discursivo que les ha permitido consolidar y reproducir su poder de dominación. En efecto, se trata de un ramillete de “ideas-fuerza” que tiende a deslegitimar a los protagonistas de la protesta social con distintos  argumentos según el contexto histórico que se trate. Así, por ejemplo, cuando las luchas obreras de principios del siglo XX, fogoneadas por sindicalistas comunistas, socialistas y anarquistas, la mayoría de ellos europeos, se fomentó la idea de que los extranjeros eran todos terroristas pone bombas. Más tarde, en octubre de 1945, la marcha que se organizó en Buenos Aires para reclamar por la libertad de Juan Perón fue descripta como un “desfile vocinglero”, en el que  “agrupaciones de elementos (…) han recorrido las calles dando vítores a ciertos ciudadanos y, en esta ciudad, acamparon durante un día en la plaza principal, en la cual, a la noche, improvisaron antorchas sin ningún objeto, por el mero placer que les causaba ese procedimiento”  (La Nación, 18-10-1945). Por último, en mayo de 1969,  los obreros y estudiantes  que protestaron contra la dictadura militar fueron descriptos como “grupos subversivos” (Crónica, 29-5-69, 1ra edición). 

Palos para todos y todas 

En marzo de 2017 los enemigos del gobierno de Mauricio Macri, fiel representante de los intereses empresariales más conspicuos, son los docentes, los movimientos sociales y los gremios controlados por la CGT. Los primeros reclaman por sus salarios –algo que ya es un clásico anual en cada comienzo de clases-, relegados históricamente al mísero subsuelo en el que habita la educación pública en todos sus niveles. Ningún gobernante de los últimos cincuenta años ha hecho gran cosa por rescatarla de ese aciago lugar. Por el contrario, todos ellos han hecho mucho por hundirla más aun otorgando generosos subsidios a la educación privada, especialmente a la de raíz católica, y autorizando con fervorosa generosidad la creación de universidades privadas. Baste recordar como ejemplo la graciosa donación de costosísimos terrenos en Puerto Madero a la Universidad Católica Argentina por parte del ex presidente Carlos Menem.

Claro que, como en toda lucha gremial, hay en juego intereses políticos personales y grupales. Roberto Baradel, por caso, el contundente dirigente de SUTEBA aspira a lograr una banca de legislador y/o un lugarcete en la conducción de las CTA unificadas (la reconciliación de los ex archienemigos Yasky y Micheli es uno de los mayores méritos de Mauricio Macri). Pero apetitos personales aparte, Baradel y sus adláteres juegan, al igual que otros gremialistas, el juego que más les gusta: debilitar a un gobierno no peronista. Les asiste la razón en sus reclamos, pero exhiben hoy una iracundia que durante el kirchnerato parece que se les extravió. Por su parte, el gobierno les contesta con descortesía: va a descontarles a los docentes los días de paro y apelando a la fuerza les impidió la instalar una estructura en la plaza de los Dos Congresos.

Mucho más conciliadores son los muchachos de la CGT. Amagaron y amagaron con un paro general hasta que no tuvieron más remedio que decretarlo. Los argumentos cegetistas fueron algo imprecisos, pero tampoco hacía falta más: cualquiera puede verificar que la situación económica general no ha mejorado en los dieciséis meses de administración macrista. Muy por el contrario, ha empeorado de manera alarmante. Un treinta por ciento de la población bajo la línea de pobreza exime de hacer más comentarios. La promesa presidencial de “pobreza cero” no fue más que una de esas frases de campaña que, como los amores de estudiantes, son flor de un día. Recuérdese, en este sentido, la “revolución productiva” y “el salariazo” de Menem. Como quiera que sea, los dirigentes llamaron a la primera huelga general. El paro en el transporte determinó un gran ausentismo. Los medios oficialistas recalcaron que hubiese sido mucho mayor la asistencia de obreros y empleados de haber podido ellos trasladarse. Es una mera especulación. Tal vez hubiesen ido los que están en mejor situación económica. Tal vez. Por otra parte, la discusión sobre el alcance mayor o menor de la huelga debe restringirse a las grandes ciudades y sus alrededores. En las ciudades más pequeñas y en los pueblos casi no hay repercusión: la vida y sus conflictos se viven de otra manera.

Por último, los más odiados por las clases medias y altas urbanas: los piqueteros de los movimientos sociales. Se asiste a un verdadero rebote de la furia anti piquete que parecía haberse calmado en los últimos tiempos. Quizá haya sido que hubo muchos cortes en los últimos meses o quizá los integrantes de estas clases consideran que a “su” gobierno no se le deben hacer piquetes, pero por lo que fuere periodistas y ciudadanos respetables venían reclamando mano dura con los piqueteros. Y  la consiguieron, tanto el día de la huelga general como con los docentes en Congreso. Es que, aguijoneado por los medios y los respetables ciudadanos –que sólo les importa que los dejen ir trabajar para ganar un salario miserable- el gobierno, que hasta el momento se había mostrado bastante cauto, dio comienzo a una peligrosa escalada represiva. 

Marchas para todos y todas 

El 8 de marzo, en ocasión del Día Internacional de la Mujer, se organizó una manifestación en la que centralmente se reclamó por el cese de la violencia contra las mujeres. Con alarmante frecuencia están ocurriendo femicidios y violaciones frente a un gobierno que no atina a dar forma a medidas de prevención, educación y capacitación. En cambio, los funcionarios y cierto periodismo “anti garantista” prefieren caerles a los jueces que pronuncian sentencias consideradas leves, o que otorgan la excarcelación anticipada a violadores. En el caso de Micaela García resultó muy conveniente echarle toda la culpa al juez que liberó a su supuesto asesino -en un decisión discutible pero legal-, pero a los varones no nos resulta tan fácil hacernos cargo de nuestro propio machismo; tampoco le es fácil al periodismo asumir su violencia simbólica ("Una chica no puede andar sola a las 5 de la mañana, dijo Samuel Gelblung; el novio "no le perdonó la infidelidad con un compañero de militancia", se escribió en Clarín). Qué fácil es desde el gobierno pedir que sancionen al juez. Pero las necesarias políticas públicas de educación en la igualdad de los géneros y de prevención de la violencia hacia las mujeres brillan por su ausencia. La violencia de género no es un problema de leyes, jueces o policías. Es un problema cultural. Es el resultado de un sistema social que santifica y convalida la superioridad masculina y denigra la condición de las mujeres.

El 24 de marzo una nueva marcha conmemoró el Día Nacional de la Memoria, la Verdad y la Justicia. Son notables las discusiones que se generan cada vez que se alude a aquel doloroso pasado de los años setenta. Por ejemplo, todavía hay quienes cuestionan el número de desaparecidos y todavía hay quienes reivindican la lucha armada. En el primer caso la evidente intención es deslegitimar la verdadera naturaleza del plan criminal que implementaron los milicos y sus padrinos civiles. El número de 30.000 desaparecidos no importa si es verdadero o no. Es un símbolo del terror ejercido contra un sector de la sociedad que mal o bien luchó por un país mejor. Y en tanto que símbolo debería ser respetado. En el segundo, sólo una profunda ceguera política es incapaz de reconocer que la lucha armada tiene efectos y funciones muy limitadas en un camino revolucionario. Salvo el caso de Cuba, nunca una guerrilla pudo implantar una revolución. De todas formas, lo interesante es advertir cómo en algunos sectores de la sociedad –ciertamente minoritarios- todavía hay debates que podrían suponerse ya cerrados, lo cual dice mucho de las diversas formas en las que funciona el ejercicio de la memoria, esto es, que no hay ningún relato absolutamente incuestionable y monolítico. En todo caso, cado uno/a cree en el relato quiere creer. En este marco, el nuevo obispo castrense al reclamar cárcel domiciliaria para los milicos asesinos, apropiadores de bebés y violadores, soslayó su responsabilidad criminal: "Si una persona mayor de las fuerzas armadas tiene el mismo derecho que otra en su condición, ¿por qué no dárselo? Por más que se haya equivocado gravemente tiene ese derecho. Aunque tampoco fueron todos, algunos no se han equivocado gravemente" (Clarín, 9-3-17).

Por último, el gobierno tuvo una significativa marcha a favor. Con la cola sucia, los días previos los funcionarios afirmaban que no la habían convocado ni alentado, pero cuando advirtieron que su magnitud era muy superior a la esperada se la apropiaron como un triunfo del oficialismo. Los diarios afines comenzaron a hablar de un “relanzamiento” de un gobierno que había recuperado “oxígeno” gracias al apoyo de los respetables ciudadanos. Esto del “relanzamiento” no es otra cosa que una operación de prensa: Macri & Cía. no se piensan mover un ápice de sus convicciones y seguirán gobernando para los que más tienen. Habrá que ver hasta cuándo. 

http://revistacontracultural.blogspot.com.ar/

Bálsamo



VICTORIA DE ALIANZA PAÍS FRENA A LA DERECHA EN ECUADOR 

Luego de una ardua campaña, el candidato oficialista Lenin Moreno triunfó en el ballotage por dos puntos. Con diez años de gobierno de la revolución ciudadana y el constante desgaste que los grandes medios de comunicación generan, el triunfo es más que significativo. No sólo para el Ecuador, sino para Latinoamérica toda. 

Por Marcelo J. Levy 

La victoria de Lenín Moreno trasciende al Ecuador. Es un freno a la restauración neoconservadora de la región y aire fresco para el progresismo latinoamericano. Quienes sentenciaban el fin de ciclo de las experiencias nacionales y populares en la región se quedaron pedaleando en el aire evidenciando que lo que verdaderamente hay es un continente en disputa.

De las últimas seis elecciones presidenciales, solo una fue ganada por las que se consideran ‘las fuerzas del cambio’ (de más está decir que es Argentina). De igual forma, el chavismo perdió las elecciones legislativas agudizando el enfrentamiento con la oposición, destituyeron a Dilma Rousseff y Evo Morales perdió un importante referéndum para habilitar una nueva reelección. Todos estos escenarios, y podemos incluir también el referéndum por la paz en Colombia, contribuyeron con la idea de que una nueva ola conservadora se instalaba como efecto contagio frente a una sociedad derechizada. Ecuador refutó esta teoría. Lo cierto es que luego de algunos meses de gobiernos conservadores, de venta de espejitos coloridos y promesas marketineras, la mayoría de la población ecuatoriana decidió continuar el camino iniciado por Rafael Correa. Y como decía, esta victoria es fundamental porque se luchó contra todos los molinos de viento: medios de comunicación, la justicia, las corporaciones, los bancos y, como soslayarlo, el injerencismo norteamericano. A pesar de todo entonces, se pudo. Y eso es un gran mensaje para el resto del continente.

Hay que destacar que Rafael Correa ha superado obstáculos que no cualquier mandatario puede. Desde aquel intento de golpe de estado montado por las fuerzas policíacas aquel fatídico 30 de septiembre de 2010, el derrumbe del precio petróleo y un terrible terremoto que dejó a la deriva a pueblos como Manabí, donde Moreno obtuvo 63% de los votos en la segunda vuelta. El progresismo tiene un desafío que puede superar si empieza a leer correctamente las señales de la región. Más, teniendo en cuenta que el año próximo hay elecciones en Brasil, Uruguay, Paraguay, Colombia y México. ¿Se imaginan una nueva camada de mandatarios progresistas en un contexto de un mundo que se cierra? Sería una gran oportunidad para demostrar que los procesos de distribución de la riqueza no sólo fueron gracias al alza de los comodities, sino más bien a la voluntad política. Los pueblos exigen y hay que ponerse a su altura para representarlos. De eso se trata, de construir nuevas mayorías.

Ecuador tiene ese desafío ahora. El pueblo renovó la confianza. Lenin Moreno significa la continuación de la Revolución Ciudadana, la profundización de modelos de cambios profundos como en Venezuela y Bolivia. En Ecuador ha habido una reducción del 30 por ciento de la pobreza, del 55 de la pobreza extrema, ha habido un descenso del índice Gini, menos desequilibrios entre los más pobres y los más ricos, ha habido una mejor y más eficiente recaudación  de impuesto, que ha conllevado a su triplicación, y de esta forma, el Estado ha tenido mayor ingreso para llevar a cabo las políticas de redistribución de la pobreza. Aunque el proceso de dolarización y el precio del crudo afectaron directamente su economía, Ecuador es considerado un país que no sólo ha saldado la crisis con los más pobres sino que ha continuado con las políticas de carácter social.

La derecha, en tanto, encarnada en el banquero Guillermo Lasso, no acepta la derrota. Y es lógico. Ellos nunca pierden. El capital gana y quiere ganar más. El caso ecuatoriano es testigo en la región: o se consolidan los gobiernos oligárquicos y antipopulares o se reencauza el camino de los pueblos. Habrá que estar atentos, ser estratégicos y saber leer lo que ocurre en cada país latinoamericano.  

http://revistacontracultural.blogspot.com.ar/

Enmienda y crisis en Paraguay



UNA PUJA DE DOS ALIANZAS ENTRE PARTIDOS DE DERECHA Y DE CENTROIZQUIERDA 

En torno nuevamente a la idea de la reelección se instala una nueva crisis entre dos fracciones de la derecha paraguaya, una que busca habilitar nuevamente a Horacio Cartes y otra que rechaza la posibilidad de continuidad de éste, destacando los rasgos autoritarios que posee el gobierno de Horacio Cartes, que es real, se aprovecha para instalar un discurso democrático, dentro de los límites oligarcas y electoralistas, por supuesto. Que, reitero, todos estos sectores habían sido aliados para concretar el golpe contra el gobierno de Lugo en el 2012. En medio de esta crisis se encuentran dos sectores progresistas o vinculados a la izquierda, Avanza País (AP) y Frente Guazú (FG) -que tiene como principal referente a Fernando Lugo-, ambos sectores en lugar de aprovechar la crisis de la clase dominante, lo que hacen es profundizar sus diferencias, y cada uno de ellos se alía con una franja de la derecha. 

Por Abel Irala (desde Paraguay) 

Antecedentes 

No es la primera vez que en Paraguay se habla de la posibilidad de reelección de un presidente, ya en el gobierno del colorado (ANR) Nicanor Duarte Frutos (2003-2008) se había planteado esta posibilidad pero tuvo un fuerte rechazo por parte de la mayoría de la sociedad. Incluso, la figura de Fernando Lugo, tomó fuerza después de que éste había sido uno de los principales referentes de una marcha contra la propuesta de reelección. Ya conocemos lo que sucedió en el 2008 con la victoria de Lugo y una práctica política del “poncho juru” (boca del poncho) palabra en guaraní para calificar que está en el medio, en el centro; blando y complaciente en varias ocasiones con el modelo neoliberal, pero en el más mínimo intento de abrir alguna posibilidad de bienestar para la mayoría, se produjo el golpe de estado parlamentario en el año 2012, que fue impulsado por una parte de la derecha (los liberales o PLRA) que acompañaron a Lugo en su campaña y en su gobierno, posteriormente éstos liberales se aliaron con el otro sector de la derecha (encabezados ya por el millonario Horacio Cartes) para concretar el golpe parlamentario y posibilitar la presidencia de Federico Franco del partido liberal hasta la asunción de Horacio Cartes en el 2013. La elite política paraguaya, representada en sus dos partidos tradicionales, Liberales (PLRA) y Colorados (ANR), por momentos entran en lapsos de fuertes crisis, probablemente parte de esa crisis ha llevado a Fernando Lugo a la presidencia de la república, la crisis fue resuelta con la destitución de Lugo. En estas crisis existen actores de mayor relevancia que mueven los hilos del poder, como las transnacionales, el capital extranjero y la embajada estadounidense. 

El escenario actual y los movimientos de izquierda a derecha 

En torno nuevamente a la idea de la reelección se instala una nueva crisis entre dos fracciones de la derecha paraguaya, una que busca habilitar nuevamente a Horacio Cartes y otra que rechaza la posibilidad de continuidad de éste, destacando los rasgos autoritarios que posee el gobierno de Horacio Cartes, que es real, se aprovecha para instalar un discurso democrático, dentro de los límites oligarcas y electoralistas, por supuesto. Que, reitero, todos estos sectores habían sido aliados para concretar el golpe contra el gobierno de Lugo en el 2012. Se entiende por golpes blandos o suaves, una nueva estrategia del neoliberalismo para planificar y ejecutar desestabilizaciones políticas, sociales y económicas que permitan la restitución plena del modelo ante algún signo de amenaza al poder neoliberal (Rabilotta), con un claro apoyo de los monopolios de medios de comunicación que actúan ideológicamente para legitimar las acciones de las clases dominantes. 1 En medio de esta crisis se encuentran dos sectores progresistas o vinculados a la izquierda, Avanza País (AP) y Frente Guazú (FG) -que tiene como principal referente a Fernando Lugo-, ambos sectores en lugar de aprovechar la crisis de la clase dominante, lo que hacen es profundizar sus diferencias, y cada uno de ellos se alía con una franja de la derecha. El Frente Guazú entonces elabora un discurso más o menos así: En medio de la crisis de la derecha nosotros vamos a jugar nuestro proyecto, que es conseguir la figura de la reelección y candidatear a Fernando Lugo que es el único capaz de derrotar a los proyectos más conservadores, tradicionales y/o neoliberales que puedan presentarse para el 2018, que es el único que puede derrotar a Horacio Cartes y que va a permitir la acumulación de fuerzas de la izquierda. Por su parte, Avanza País alega los siguientes planteamientos: en este contexto apoyar la enmienda, es ser funcional al proyecto de Cartes, es imposible pensar en derrotar a Cartes con su poder económico y con el manejo del aparato estatal a su lado, aseguran hay que rechazar la enmienda y acusan a Lugo y Frente Guazú de traidores. Avanza País se encuentra en miras a una alianza electoral para intentar posicionar a Mario Ferreiro (actual intendente de Asunción) para que vuelva a ser candidato presidencial (ya lo fue en 2013 por Avanza País y lograron 2 bancas en senadores, mientras que el FG de Lugo consiguió 5), desde el punto de vista electoral inmediato no tiene interés en la reelección. Vale decir que existe otro sector de la izquierda, vinculado principalmente a la Federación Nacional Campesina (FNC) que no ingresa en esta discusión por considerarla electoralista, institucionalista, porque cree que no son los problemas del pueblo, que el pueblo está con otros problemas que son urgentes de resolver, y denuncian los diferentes tipos de violencias del que son víctimas. 

El poder de los medios 

El papel de los medios de comunicación es clave, como en todos los procesos políticos de nuestro continente, los grupos privados del empresario AJ Vierci y el conocido diario de ultra derecha, ABC color, del empresario Aldo Zucolillo, se han posicionado clara y radicalmente en contra de la reelección presidencial. Horacio Cartes, probablemente, ya previendo esta situación, ha comprado una buena cantidad de medios de comunicación, que están en manos de su hermana Sara Cartes porque la constitución nacional prohíbe que el presidente de la república sea propietario de estos medios, entre los medios ya conocidos como los del “grupo Cartes” se encuentran el diario “Hoy”, “La nación”, la radio 970, desde donde hace propaganda a su gestión e intenta colocar la necesidad de la reelección, pero no logra el impacto deseado. Muchas tergiversaciones y manipulaciones por parte de los medios, que a veces juegan su propia disputa, pero que en realidad son parte de un engranaje mayor, tanto que lo que se ha logrado instalar en los últimos días es que la Reelección es sinónimo de dictadura, y que la no reelección es la defensa de la democracia, entonces algunos sectores de derecha se presentan como los salvaguardas de la democracia. El sector de Horacio Cartes y el Frente Guazú responden a esto con la consigna que lo verdaderamente democrático es llevar a una consulta popular, un referéndum si la gente quiere o no la reelección y los que se oponen a ésta idea son los sectores antidemocráticos. 

La enmienda en el Congreso: maniobra 1, maniobra 2, bum! 

Los sectores opositores a Horacio Cartes el 25 de agosto del 2016 presentaron rápidamente un proyecto de enmienda para la reelección, consiguieron mayoría en el Senado y el apoyo del presidente de este órgano, llamaron en el mismo día a una sesión extraordinaria, lo trataron fugazmente y lo rechazaron, todo fue vertiginoso, una farsa de proyecto, ya que los mismos que presentaron el proyecto fueron los mismos que lo rechazaron, todo para impedir que el proyecto sea tratado por el periodo de un año y dejar así sin posibilidades a los sectores que piden reelección vía enmienda de la Constitución Nacional. Los medios de Comunicación de mayor influencia nacional, entre ellos ABC color, en aquella oportunidad calificaron el hecho de “Sorpresiva maniobra”, “Madrugaron a Cartes”. Mientras que el diario Última Hora había titulado: “En jugada estratégica, Senado rechaza proyecto de enmienda para reelección”, y en el epígrafe del artículo se lee: “es una estrategia para cortar el debate de incluir la reelección presidencial a través de esta vía” (las negritas son mías). De esta misma forma, casi como una respuesta a las denominadas “estrategias sorpresivas”, u otras formas que quieran llamar a las práctica de políticas mezquinas y sectarias, los senadores del oficialismo del Partido Colorado, junto con algunos del Partido Liberal con su líder Blas Llano y el Frente Guazú que busca candidatear a Fernando Lugo (aunque Lugo se ausentó del debate y las sesiones tan cuestionadas) consiguieron mayoría para cambiar artículos del reglamente interno del Congreso y así retomar la posibilidad de enmienda para la reelección. 2 Con esta modificación, el sector mayoritario de los Senadores realizó una sesión extraordinaria el viernes 31 de marzo, presentó el proyecto de enmienda y llamado a referéndum, enviaron a la cámara de Diputados y éstos (mayoría Cartista) anunciaron que lo iban a tratar en la mañana del sábado 1 de abril. Inmediatamente sectores de la derecha no vinculada a Cartes y los grandes medios de comunicación llamaron a la movilización frente al Congreso (ya lo venían haciendo durante toda la semana) y se producen los primeros enfrentamientos, la represión ayudó a la indignación de la gente que fue cargándose a la plaza frente al Congreso, donde en algún momento la policía fue rebasada y la gente ingresó al edificio del Congreso Nacional, rompiendo vidrios y puertas, prendiendo fuego en partes del mismo; cuando se volvió insostenible, la policía hizo ejercicio de lo que tiene entrenamiento, reprimir y reprimir, llegando a la lamentable muerte de un joven de 25 años de edad, Rodrigo Quintana, y más de 200 personas detenidas. 

Por último 

Paraguay se debate hoy en medio de oportunismos políticos, desfachatadas acciones por parte de ambos sectores, pro enmienda y anti enmienda, en ambos se encuentran a sectores de derecha e izquierda aliados contra otros sectores de derecha e izquierda. Se asiste a un momento en el que se trata de vaciar de contenido la democracia, así también lo que es un golpe, intentando colocar que lo que ocurre ahora es un golpe y así crear nuevos golpistas, mientras que en realidad actualmente los golpistas están divididos momentáneamente y quieren aprovechar la coyuntura para sacarse ese mote antidemocrático. No creo que lo que se está viviendo en Paraguay sea un Golpe, si una enorme fisura y una disputa muy fuerte entre las clases dominantes para definir cuáles de los sectores serán los encargados de guiar el modelo de acumulación en los próximos años; no se sabe con certeza hasta donde son capaces de llegar, ni hasta donde extenderá esta crisis, las disputas entre las élites puede acrecentar los niveles del violencia y el movimiento popular, los sectores progresistas, deberán ajustar sus estrategias para no ser subsumidos por esta disputa de poderosos, si aún están a tiempo. 

Notas:  

1 Alberto Rabilotta. “El dueño de la pelota y las reglas del juego” http://www.alainet.org/es/articulo/176315 
2 Se puede ver al respecto:  
http://www.abc.com.py/abc-tv/locales/frenan-intencion-de-reeleccion-via-enmienda-1512513.html
http://www.ultimahora.com/senadores-pro-enmienda-aprueban-modificacion-reglamento-interno-n1073841.html
http://www.telesurtv.net/news/Que-implica-la-reforma-del-reglamento-del-Senado-de-Paraguay-20170329-0031.html